La construcción modular, un tipo de prefabricación, está a la cabeza de las prácticas de construcción respetuosas con el medio ambiente, ya que reduce los residuos en la industria y utiliza materiales reciclados siempre que estén disponibles. Las casas y los negocios pueden construirse en una fábrica fuera de las instalaciones y luego transportarse a su ubicación final para el montaje definitivo y convertirse en un elemento permanente. Como el proceso de fabricación está regulado, es posible obtener un resultado final de mayor calidad. En este post te mostraremos algunos detalles interesantes sobre la historia de las casas modulares y su importancia para el medio ambiente.
¿Cuándo y por qué empezó la construcción modular?
El concepto de construcción modular existe desde hace miles de años, pero su potencial disruptivo en el sector de la construcción acaba de apreciarse plenamente. Los remolques prefabricados tuvieron un periodo de crecimiento después de la Segunda Guerra Mundial como forma de proporcionar viviendas rápidas y económicas. Este tipo de casa móvil se rebautizó posteriormente como «casas modulares«.
La variante moderna de la construcción modular consiste en construir los módulos individuales de una estructura en una fábrica, uno a uno, desde cero; sellarlos con una membrana para evitar que se dañen por los elementos durante el transporte en camión hasta el lugar de la construcción; y luego ensamblar los módulos una vez allí.
La clase volumétrica incluye incluso los prefabricados más básicos. Los edificios de seis lados, incluidos sus interiores, se hacen en una fábrica y luego se sueldan en la obra.
En los últimos 100 años, ha habido muchas épocas en las que la gente estaba más interesada en las viviendas modulares, como durante el boom de la construcción de los años 70, el boom del diseño de principios de los 2000 y la actual crisis inmobiliaria.
En la actualidad es uno de los métodos de construcción más moderno y con más ventajas, en comparación con otros métodos. Este método de construcción ha sido considerado por varias autoridades como la opción más ecológica, eficiente y económica.
Evita los residuos y ahorra recursos con la construcción modular.
Una de las ventajas de la construcción modular es que genera muchos menos residuos que los métodos de construcción tradicionales. Los residuos de construcción y demolición (también conocidos como materiales C&D) representaban un asombroso tercio de la basura creada en las construcciones. Pero con la construcción modular, se puede observar un gran ahorro de recursos y producción de residuos. Siendo la construcción modular el método mas ecológico y respetuoso con el medio ambiente, que existe actualmente.
Debido a la naturaleza controlada del proceso de fabricación, la modularidad hace que el uso exacto del material sea mucho más sencillo. Los materiales que no se utilizan en un proyecto pueden guardarse para utilizarlos en otro sin tener que salir del edificio. Evitar la demolición y mantener los materiales en condiciones adecuadas para su reciclaje al final de su vida útil es sólo una de las formas en que las naves industriales reducen la cantidad de residuos causados por los daños meteorológicos (que son inevitables cuando se construye in situ).
Gracias a su portabilidad, los edificios modulares pueden trasladarse a otro lugar para su renovación, demolición o eliminación de materiales sin necesidad de demoler el edificio original. Los científicos han calculado que este método podría reducir la cantidad de residuos de construcción y demolición hasta en un 83,2%.
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